El pasado lunes, con una
mañana esplendida para la práctica del senderismo, iniciamos la ruta en el
aparcamiento de la Barranca.
El reto era viajar en el
tiempo hasta la época jurásica y realizar una visita a un “ancestral
conocido”, de antiguas andaduras, y ver si su salud seguía siendo
aceptable.
Cruzamos el embalse del
Ejercito del Aire, para situarnos en la margen izquierda del Arroyo de la
Maliciosa,
desde donde iniciamos la
subida continuada, en dirección hacia el Peñotillo bajo,
La cabaña caprina en este
trayecto, nos observaba de cerca sin dar muestra alguna de intranquilidad por
nuestra presencia en su hábitat,
Durante el ascenso y hasta
llegar al collado, las vistas de la Maliciosa, sus alrededores, la ladera del
mirador de las Canchas y la sierra de las Cabrillas eran espectaculares,
Cuando comenzamos la bajada
hacia el arroyo de Peña Jardera, que alimenta al embalse de la Maliciosa,
“nuestro amigo”
comenzaba a observarnos desde la lejanía,
Así que, tras un esfuerzo
final, nos presentamos en los dominios del Sr. Dinosaurio que nos recibió,
como siempre, con su presencia silenciosa y su saber estar a través de los
siglos,
Tras el refrigerio, en su
compañía, la vuelta por el camino de inicio; cuatro horas y media de intenso paseo, ida y
vuelta, que nos siguen manteniendo en forma.